ABRIL es un mes complicado, justo acaba de iniciar la primavera y aún podemos tener peligros de "heladas primaverales” así que tendremos que proteger los cultivos más sensibles al frío como tomates, calabazas...  O al contrario, pueden subir las temperaturas y tendremos que ventilar los invernaderos  para que no se deshidraten las plántulas.
Si se alternan días calurosos y lluviosos aumentará el riesgo de enfermedades (se aconseja prevenir con decocciones de cola de caballo y azufre pulverizado al amanecer para evitar las podredumbres, el mildiun y el oídio principalmente).
Empezaremos con los primeros acolchados tanto en siembras del mes anterior como en trasplantes. Plantar abonos verdes. Voltear el compost y enriquecerlo con:  rocas en polvo, cenizas o cal, en suelos ácidos. Arenas, hojas o turbas de fibras de coco en suelos pesados.